Teletrabajo y salud postural: cómo evitar que tu espalda pague las consecuencias
El teletrabajo es ya una realidad consolidada y, aunque ofrece comodidad y flexibilidad, también ha incrementado el número de personas que consultan por molestias musculares, dolor lumbar o tensión cervical. La causa suele ser la misma: pasar horas delante del ordenador sin un espacio de trabajo preparado para ello.
Desde la Unidad de Traumatología y Cirugía Ortopédica de Olympia Quirónsalud, los especialistas alertan de que muchos de estos problemas podrían evitarse con hábitos sencillos. El Dr. José Ramón Muiña Rullán, traumatólogo y cirujano ortopédico del centro, explica que "los pacientes no suelen ser conscientes del impacto que tiene la postura en su día a día. Al trabajar desde casa improvisamos más: usamos sillas que no están pensadas para largas horas o colocamos el ordenador demasiado bajo, y eso a medio plazo acaba pasando factura".
El especialista insiste en que generar un entorno ergonómico adecuado no requiere grandes inversiones, sino prestar atención a pequeños detalles del puesto de trabajo. "La clave está en mantener la columna alineada y evitar posiciones forzadas.
Muchas de las molestias que veo en consulta tienen su origen en hábitos que se pueden corregir fácilmente", señala el Dr. Muiña.
Además de adaptar el espacio, los expertos recuerdan que es fundamental introducir movimiento a lo largo de la jornada, algo que a menudo se pasa por alto en el teletrabajo. "No deberíamos permanecer más de una hora sin levantarnos o movernos un poco. El cuerpo no está diseñado para estar inmóvil tanto tiempo, y las pausas activas son esenciales para descargar la musculatura y mejorar la circulación", añade el traumatólogo.
El Dr. Muiña recuerda, además, cuándo es importante pedir una valoración médica: "Si el dolor persiste, se irradia hacia las piernas, hay hormigueo o sensación de debilidad, es necesario estudiarlo. No todo es postural, y un diagnóstico temprano evita complicaciones".
Además de adaptar el entorno de trabajo y realizar pausas activas, el Dr. Muiña recuerda que la mejor herramienta para prevenir el dolor de espalda es reforzar la musculatura. "Los ejercicios de core, que incluyen abdomen, oblicuos y zona lumbar— son fundamentales para estabilizar la columna y reducir la carga sobre las articulaciones", explica. También recomienda ejercicios de fuerza bien guiados y disciplinas como Pilates,que mejoran la postura, la movilidad y el control corporal. "No hace falta equipamiento complejo; con una esterilla y una rutina regular ya se pueden obtener grandes beneficios. La combinación de higiene postural, cambios frecuentes de posición y ejercicio rutinario es la clave para mantener una espalda sana", concluye el especialista.



